Hola a tod@s:
En los últimos días, ha salido a la luz un nuevo caso de corrupción política. Una lacra para una sociedad como la nuestra, que no por ocupar más minutos de la actualidad debe dejar de avergonzarnos.
Y lo digo, desde la responsabilidad y el
orgullo que supone ser Alcalde y militante desde hace 14 años en el PP, pero
con un profundo sentimiento de
indignación y de repulsa a quienes utilizan la política, bien a través de las
administraciones o bien a través de los partidos políticos para beneficiarse y
lucrarse de forma ilícita.
Soy Alcalde y no entiendo este trabajo más allá de lo que
supone el beneficio de los demás y la búsqueda de los intereses comunes. El
mejorar las condiciones de vida de mis vecinos y del pueblo que me ha visto
nacer y al que le debo gran parte de lo que soy. Que no haya nadie que tenga
que renunciar a sus sueños porque no se dan las condiciones para
desarrollarlos. Eso es la política. La
política en la que yo creo y por la que hace ahora cuatro años decidí
embarcarme en la aventura de ser Alcalde.
Cuatro años después, sólo el
hecho de serlo hace que la gente piense que eres un chorizo. De acuerdo que hay
más de 600 municipios salpicados por casos de corrupción, pero no debemos
olvidar que en España hay más de 8.000 municipios. Más de 8.000 Alcaldes y más de 90.000 concejales que estoy seguro que
trabajan honradamente y muchos de ellos sin remuneración.
Para aquellos que han corrompido la política, mi condena, mi repulsa y
el deseo que mi partido, y también todos los demás, sean contundentes en sus
decisiones. No quiero gente que ensucie el trabajo de tantos. Podemos
cometer errores en la gestión, podemos equivocarnos en la toma de decisiones,
pero nunca aprovecharnos del sistema en nuestro beneficio.
La corrupción no sabe de partidos, corruptas lo son las personas.
Pero independientemente de ello, ha habido un sistema que ha favorecido a
unos aprovechados y hay que trabajar por solucionarlo.
Y respecto a esta gentuza, que me
deja sin palabras, no basta solo con apartarles de los partidos y de la vida
pública, deben pagar por lo que han
hecho y ayudar a restaurar todo el daño que le están causando a una
sociedad harta de que se aprovechen de ella.
Necesitamos gente honrada. Ser firmes y contundentes contra la corrupción.
No volver a permitir estas conductas en el futuro. Y hacer que la sociedad deje de ver la
política, en la que creo como base fundamental para el desarrollo de todos
los pueblos, como uno de los problemas
cuando debe de ser la solución.
Un abrazo de vuestro Alcalde.
Alberto Magdaleno de la Viuda.